¿ES SATANICA LA SANIDAD INTERIOR? Primera Parte

Actualmente existen muchos foros y paginas en donde se difunde la idea expresada en este título, precisamente para argumentar contra las iglesias emergentes y tildarlas de sectarias. Estas ideologías fundamentalistas precisamente surgen junto al movimiento de renovación que desde los años 80 inició un despertar espiritual sin precedentes, hoy existen incluso bautistas históricos en Chile, Argentina, Brasil, etc que se han unido a este mover que no ha cesado pues se reconoce que es de Dios. Pero la natural reacción del fundamentalismo sectario (me refiero a la actitud no a un grupo en particular), apoyado por Seminarios e institutos biblicos en toda latinoamerica han «despertado» un mover precisamente para oponerse a esta renovación. Han elaborado fantásticos libros, cursos, páginas de internet, obviamente no lo hacen con un afán de confundir, pero el poco tacto, la verborrea teológica y una pisca de espíritu fariseo está confundiendo los conceptos bíblicos en medio de las iglesias tradicionales.

Leí de rebote un singular artículo estableciendo que la psicología cristiana y en particular la Sanidad interior no son sino una manifestación encubierta de satanismo, y claro, traté de no tomarmelo a pecho. Por eso creo que modigerando lo dicho es necesario decir que la psiquiatría, la psicología, la psicología cristiana, la sanidad interior y todas las disciplinas que trabajan con trastornos de la mente y el alma son una poderosa herramienta para la restauración de una humanidad sumida en depresiones, sicosis, doble ánimo, paranoias, etc.

1. La falacia de decir que la ciencia no está al servicio de Dios. La «satanización» de la Sanidad Interior parte señalando que la ciencia no puede entrar en el área del alma, pues ese es el lugar que le corresponde a la Palabra de Dios: «La Biblia enfatiza que el alma es un lugar donde la ciencia no puede llegar pero sí tiene acceso la Palabra de Dios, Hebreos 4:12 “Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.” (Hector Cattani, «La Satánica Sanidad Interior» en adelante HC de la Iglesia Bautista de la Plata)

• Sí, la Palabra penetra hasta las fibras más recónditas de nuestro ser, pero también la malicia, la hipocresía, la murmuración, las palabras dichas con resentimiento, la agresión verbal, la violencia psicológica.
• «Psicología, deriva de la palabra griega PSYJE, PSYCHE= ALMA, de manera que pretenden(los que usan la sanidad interior) con técnicas humanas, atender o suplir los problemas y necesidades del alma.»(HC) Dios no solo puede intervenir en lo natural de modo directo sino que por medio de las capacidades humanas puestas a su servicio puede desarrollar junto al hombre un trabajo de colaboración.»…Porque nosotros somos colaboradores de Dios…»
  ( 1 Cor. 3:9a)
• «En S.Juan Cap. 4 El Señor no le ofreció a la mujer de Samaria “Sanidad interior” para arreglar su problema moral y espiritual: Vers. 13,14 “Respondió Jesús y le dijo: cualquiera que bebiere de esta agua volverá a tener sed; más el que bebiere del agua que yo le daré, será en él una fuente de agua que salte para vida eterna.” (HC). JESUCRISTO SI OFRECIÓ SANIDAD INTERIOR. Primero, Jesucristo rompió con un prejuicio( una estructura de pensamientos, argumentos de hombre, lo cual se genera en la mente) : él, siendo Judío se dirigió a una Samaritana que era considerada genética, social y espiritualmente impura para el pueblo de Israel. Segundo, restauró la autoestima de una mujer solicitandolé su ayuda para satisfacer una necesidad biológica como era el beber agua. Tercero, Jesucristo le ofrece de un agua que saciaría todo su ser interior, acá es donde interviene el Espíritu Santo, treyendo convicción de pecado, confrontación con su vida moral, al decir que no tenía marido no hizo sino una confesión de su situación que luego es aclarada por revelación. La Sanidad Interior parte en Jesucristo, no en la técnica humana, luego el mismo Jesucristo por medio de sus siervos restaura el alma del menospreciado. El Espíritu Santo interviene, redarguyendo el corazón y vivificando las Palabras de Vida.

• «Lucas 19:1 –10 Cristo trata con Zaqueo; no le ofreció “Sanidad interior” le aclaró que la salvación había llegado a la casa, porque el Hijo del Hombre vino a buscar lo que se había perdido» (HC). Cristo sí le ofreció sanidad interior.Primero, restaura el autoestima de Zaqueo, siendo este pequeño y más aún catalogado como un ladrón y traidor al pueblo, Jesús mira hacia el arbol donde se encontraba y le dirige la palabra, lo hace descender y le da el privilegio de estar cenando con él. Segundo, la sola presencia y conversación con Jesús hace que Zaqueo se despoje de su orgullo publicano, de sus fraudes y su manía por robar al pueblo con los tributos, decide restaurar a quienes había defraudado. Tercero, Jesucristo luego de la decisión de Zaqueo declara que la Salvación había llegado a su casa. Cristo lo sanó primero, Zaqueo confiesa su iniquidad y decide actuar (la voluntad está en la mente, solo una mente sana tiene la capacidad de decidir la acción y actitud correcta), el resultado: La Salvación. Pero nótese que fue paso por paso.
• «De manera que según este movimiento (renovación) la Iglesia tiene que derivar sus problemas al diván del psicólogo quien le va a ofrecer una vía de escape y le hablará de la necesidad de encontrarse a sí mismo. Isaias 55:6-7 “Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano. Deje el impío, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar. Los hermanos no necesitan el diván de un psicólogo sino pastores fieles y llenos del Espíritu Santo que usen la Biblia y solo la Biblia porque ella es suficiente para enfrentar y solucionar toda especie de problemas.»(HC)La Base de toda sanidad está en el perdón y en el arrepentimiento, sí, buscar a Dios mientras pueda ser hallado, sí, la Biblia es suficiente, pero sólo cuando se graba en nuestro corazón, cuando Dios Escribe sus Palabras en las tablas de nuestro corazón, por eso el Libro de Salmos habla de meditar (operación intelectual, uso de la razón, disposición del alma) en ellas, pero si no existe la voluntad de hacerlo limitándose a repetirlas como disco rallado entonces la Biblia solo será un libro más. Nunca las Escrituras dicen que es la BIBLIA la suficiente, sino que dice «LA PALABRA DE DIOS». Es una sutileza terminológica importante que será para otro post.
• «2da. Corintios 5:17; “De modos que si alguno está en Cristo nueva criatura es, las cosas viejas pasaron, he aquí todas son hechas nuevas.”Para el cristiano verdadero el pasado no tiene ningún poder porque fuimos limpios en la sangre preciosa de Jesucristo y Esto no es una teoría(HC)». Sí, en Cristo todas las cosas del pasado quedaron atrás, dejaron de ser, y que todas las cosas son hechas nuevas. Eso es verdad, irrefutable, en cuanto a la Salvación esto es claro, pero no en vano el mismo Apóstol habla de la carne y sus deseos: «Porque según el hombre interior, me deleito en la ley de Dios; pero veo otra ley en mis miembros, que se rebela contra la ley de mi mente, y que me lleva cautivo a la ley del pecado que está en mis miembros. ¡Miserable de mí! ¿quién me librará de este cuerpo de muerte? Gracias doy a Dios, por Jesucristo Señor nuestro. Así que, yo mismo con la mente sirvo a la ley de Dios, mas con la carne a la ley del pecado.»(Rom. 7:22-25), Pablo reconoce este conflicto y en la necesidad de que intervenga la sanidad de su mente para dominar su carne, debilidades, depresiones, etc.

• «El cristiano no necesita pildoritas o pastillas para sus problemas “… pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos (Gálatas 5:22-24)»(HC). Entonces tendríamos que decir que Cristo se equivocó con haber hecho un lodo con su saliva que luego puso en los ojos del ciego. Sí, Dios puede hacer el milagro de que no tomemos pastilluelas, y el milagro se produce cuando vamos todos los días al Calvario siguiendo el ejemplo de Pablo:¿Y por qué nosotros peligramos a toda hora? Os aseguro, hermanos, por la gloria que de vosotros tengo en nuestro Señor Jesucristo, que cada día muero. Entonces, sin dudar del acto del Sacrificio de Cristo como el referente de nuestra cura, la sanidad de nuestra alma con o sin psicología es esencial en este proceso de vivir en Santidad.
  

continuará